La DECADENCIA de Occidente es en caída libre.
Los americanos le han comunicado a Trump que no quieren seguir empobreciéndose cada día más, con lo que tienen que cambiar las «Reglas de Juego» y, como ya no son los más competitivos ni productivos ni tienen la mejor Tecnología pues «el camino» del Globalismo no les interesa y quieren saber quienes son sus países amigos y quienes no.
¿Cómo saber de una manera fácil qué países son amigos y quienes no? Pues mirando la balanza comercial y hacer un estudio de qué países «confían» en Estados UNidos y quienes no.
Si un determinado país le vende mucho más que le compra es porque en los productos que le vende es mucho más competitivo y barato que esos productos fabricados en el mismo Estados Unidos. Y entonces tiene que ponerle un precio añadido, de un arancel, que sea igual o inferior al que sería se se fabricara en Estados UNidos.
Ejemplo: Si un determinado producto, como una zapatilla deportiva que Estados Unidos importa de Vietnam, se la vende Vietnam a Estados Unidos por 40 dólares y en Estados Unidos cuesta fabricarla 70 dólares, pues Estados Unidos le pone un arancel de 30 dólares, para que cueste «lo mismo», dentro de Estados Unidos, y si el ciudadano americano compra la fabricada en Vietnam, pues paga 70 dólares, pero al Estado le ha costado 40 con lo que le quedan 30 dólares de margen que repercuten en todos los ciudadanos americanos y, en definitiva, es como si al ciudadano americano le hubiese costado sólo 40, ya que los restantes 30 le vienen, indirectamente, a través de servicios del Estado, como pueden ser la sanidad, la educación, la seguridad, las infraestructuras…
Y, si por otra parte, por ejemplo, un fabricante de coches, como Porsche o Mercedes, cuyo mayor mercado es el americano tienen que vender un coche a Estados Unidos, con un precio competitivo dentro de Estados Unidos, si lo fabrican, por ejemplo en Alemania, tienen que venderlo a un precio inferior al 25% del que sería si lo fabricaran directamente en Estados Unidos. Y aparte el trasporte, que también es muy caro… Pues los fabricantes de automóviles europeos tendrán que trasladar sus fábricas a Estados Unidos si quieren vender coches…
Pero trasladar fábricas a otro país significa perder puestos de trabajo en el país de origen… Y si Alemania se queda «en el paro»… ¿De qué vivirán los alemanes? Si se continúa dándole el Banco Central europeo a la máquina del dinero para poder dar ayudas y subvenciones… la inflacción cada día será mayor… y las «propiedades» existentes, como las casas, serán cada día más caras, habrá un colapso y la ruina será total…
Yo entiendo que las «élites» europeas estén cabreadas… pero como los chinos ya no son tontos y tienen «poco sentido» los cuentos chinos, pues los americanos tampoco son tontos…
Donald Trump es el Presidente de Estados Unidos y se debe a los americanos…
Si Sánchez y otros líderes europeos prefieren premiar a los sirios u a otros en vez de a los suyos no es problema de los americanos sino de nosotros por elegir esos representantes para que nos gobiernen…
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