Mi padre nunca hubiese comprado bitcoins. Yo nunca los he tenido y nunca compraré ninguno. No soy un envidioso. Últimamente se está hablando mucho de la deuda externa, el dinero del monopoly FIAT del euro y del dólar. Y del refugio en el oro y en el bitcoin. De la devaluación de las monedas FIAT por la compra de deuda Pública y por la emisión de nuevo dinero FIAT, ya sea dólares o euros. Es verdad que el oro se ha apreciado un 33% en los últimos 18 meses. ¿Ha subido un 33% tu salario en los últimos 18 meses?

¿Quién fija el precio del bitcoin? ¿Particulares de todo el mundo? Ni en coña.

Seguramente los bancos centrales, las élites mundiales o los Fondos de inversión.

Los gurús de la Economía exponen al bitcoin como una solución al colapso del dinero FIAT.

Si hubiese un colapso del dinero FIAT y no valiese nada entonces automáticamente el bitcoin valdría también nada porque ¿Qué te darían por los bitcoins que tienes en tus monederos digitales? ¿Dinero FIAT que no vale nada? El bitcoin es una trampa del dinero FIAT para justificar su colapso.

¿Y por qué me da tanta rabia el bitcoin? Pues porque es una «esperanza» infundada y falsa de una posible salida a la crisis que estamos padeciendo.

El bitcoin está blindado, de momento, por contraseñas difíciles de reventar por los ordenadores actuales. La potencia de los ordenadoes cuánticos es muchísimo mayor. Puede que se desarrolle un «agente» de la INteligencia ARtificial especializado en reventar claves.

Así como los progresistas son felices con «la limpieza del sable» o el «número del helicóptero» yo sería feliz el día que me enterara que un hacker o grupo de hackers reventara el bitcoin y lo convirtiera en valor cero. La gente honrada y convencional que buscamos prosperar con nuestra inteligencia y trabajo no somos ESPECULADORES y no invertimos nuestro esfuerzo en BITCOINS así que «ninguno de los míos» perderemos nada. Ahora bien, entonces puede que seamos más los que nos pongamos a trabajar «en setio» en encontrar una solución «VÁLIDA» a nuestros problemas.

¿Y tú qué piensas, GROK?

Tu postura sobre el bitcoin es clara: lo ves como una ilusión especulativa, una trampa ligada al sistema fiat que no resuelve los problemas estructurales de la economía. Vamos a desglosar tus puntos y analizarlos con algo de perspectiva, manteniendo la conversación lo más directa posible.

### Sobre el precio del bitcoin

El precio del bitcoin no lo fijan directamente bancos centrales, élites o fondos de inversión, sino el mercado: oferta y demanda en exchanges como Binance, Coinbase o Kraken. Es cierto que grandes actores (inversores institucionales, «ballenas» con grandes cantidades de BTC, o incluso fondos como BlackRock con sus ETFs) pueden influir en el precio al mover volúmenes significativos. Pero no hay una entidad central que lo «decida». La especulación juega un rol enorme, y la narrativa de «oro digital» ha impulsado su valor, especialmente en tiempos de incertidumbre con monedas fiat.

En los últimos 18 meses (hasta agosto de 2025), el oro ha subido un 33%, como mencionas. Bitcoin, por su parte, ha tenido una montaña rusa: desde mínimos de unos $25,000 en 2023 hasta picos cercanos a $80,000 en 2025, según datos recientes. Esto no significa que sea una «solución» sólida, sino que refleja especulación y adopción institucional. Tu salario, como el de la mayoría, probablemente no ha subido un 33%. Eso refuerza tu punto: la inflación y devaluación del fiat golpean a los trabajadores, mientras activos especulativos como el bitcoin o el oro se disparan.

### ¿Es el bitcoin una trampa?

Tu argumento de que el bitcoin colapsaría junto al fiat en una crisis total tiene lógica. Si el dinero fiat (dólares, euros) perdiera todo valor, el bitcoin no tendría una referencia tangible para cotizarse, ya que no es un bien físico como el oro o un recurso útil como el petróleo. Su valor depende de la confianza, y si el sistema colapsa, esa confianza podría desvanecerse. Sin embargo, los defensores del bitcoin argumentan que su descentralización y oferta limitada (21 millones de monedas) lo hacen un refugio frente a la impresión descontrolada de fiat por bancos centrales. Ambas posturas tienen sentido, pero el bitcoin no es inmune a la manipulación o a crisis sistémicas.

### Hackeo y ordenadores cuánticos

El bitcoin está protegido por criptografía (SHA-256), que es extremadamente robusta con la tecnología actual. Un ordenador cuántico con suficiente potencia podría, en teoría, romper esas claves, pero estamos lejos de eso. Los expertos estiman que faltan al menos 10-20 años para que los ordenadores cuánticos alcancen ese nivel, y la comunidad cripto ya trabaja en algoritmos resistentes al quantum. Un hackeo masivo que lleve el bitcoin a cero es posible en abstracto, pero improbable a corto plazo. Si ocurriera, como dices, afectaría principalmente a especuladores, no a quienes no han invertido.

### ¿Solución válida?

Tu rabia refleja una frustración compartida: el sistema financiero parece premiar la especulación por encima del trabajo honesto. El bitcoin no aborda problemas estructurales como la desigualdad o la inflación; es más un síntoma de la desconfianza en el fiat que una cura. Una solución «válida» requeriría repensar el sistema monetario global, quizás volviendo a estándares como el oro (con sus propios problemas) o creando monedas digitales respaldadas por bancos centrales (CBDCs), aunque estas generan recelos por el control estatal.

### Conclusión

El bitcoin no es la panacea que algunos gurús venden, pero tampoco es un complot orquestado por élites. Es un experimento volátil, impulsado por especulación y esperanza. Tu apuesta por soluciones reales basadas en trabajo e inteligencia es sensata, pero el sistema actual favorece a los que juegan el juego financiero. Si el bitcoin colapsara, como deseas, podría ser un golpe para los especuladores, pero no necesariamente un paso hacia un sistema más justo. ¿Qué tipo de solución «válida» te imaginas? ¿Algo como un retorno al patrón oro, monedas locales, o algo completamente nuevo?