EL EQUIPO A CONTRA LA BANDA DEL 407: JUSTICIA EN CINCO ACTOS
(Novela de Justicia para Jóvenes Adultos – 6000 palabras)
SINOPSIS: En la España convulsa de 2016, mientras un Peugeot 407 negro recorre pueblos como un espectro teledirigido desde Venezuela, un profesor de informática y su peculiar «Equipo A» de youtubers se embarcan en una misión casi imposible: desenmascarar y llevar ante la justicia a una poderosa banda política que amenaza con destruir el país. La batalla final se librará no en las calles, sino en cinco salas de juicio simultáneas, donde la verdad y la traición colisionarán.
PERSONAJES PRINCIPALES:
- Luis: Profesor de informática barcelonés, honesto y perspicaz. Líder informal del «Equipo A».
- Víctor Aldama: Ex legionario, empresario y patriota. Infiltrado en la banda.
- «El Equipo A»: 80 youtubers diversos (analistas, humoristas, investigadores ciudadanos) movilizados por Luis.
- La Banda del Peugeot 407:
- Nº5 – Koldo García («Barracus»): Matón y protector. Portero de discoteca ascendido por la violencia.
- Nº4 – José Luis Ábalos («Murdock»): Conductor. De encargado de sauna a ministro. Impulsivo y leal al Jefe.
- Nº3 – Santos Cerdán («Melinda»): Secretario de Organización. Técnico en electrónica. Ascendido por amistad. Calculador.
- Nº2 – Pedro Sánchez («Templeton Peck»): Presidente en la sombra. El «guapo». Ambicioso y dependiente del Jefe.
- Nº1 – José Luis Rodríguez Zapatero («Hannibal»): El Jefe. Dirige desde Venezuela. Ideólogo de la Agenda 2030 de la «Pobreza Woke». Maestro manipulador.
- Los Sorosianos: Banda internacional que lava dinero y controla gobiernos mediante criptominería en casas okupadas y leyes «woke».
- Liang: Genio informático chino, amigo de Luis. Creador del revolucionario software «Synapse».
- Makarenko: Matemático ruso, amigo de Luis. Experto en trayectorias óptimas (ecuaciones diferenciales aplicadas).
- Victoria: Especialista en Inteligencia Emocional de Marbella, amiga de Luis. Clave para leer a los acusados.
PRÓLOGO: EL RUGIDO DEL 407
Barcelona, verano de 2016. El aire olía a sal, chiringuitos y tensión política. Luis, frente a su ordenador en su modesto piso del Eixample, no veía la playa. Veía diagramas de flujo de dinero, contratos públicos sospechosos de Cataluña y un mapa de España lleno de puntos rojos. Cada punto marcaba un pueblo donde un Peugeot 407 negro había aparecido, siempre precediendo un giro local hacia políticas radicales y un silencioso desvío de fondos públicos.
Recordaba sus días como ingeniero, presentando proyectos impecables y económicos para obras públicas catalanas. Proyectos que siempre perdían frente a otros, más caros y peores, presentados por empresas fantasma con conexiones políticas. «El 3%», murmuraban entonces. Ahora sabía que era solo la punta del iceberg, un iceberg que se lavaba en Andorra y se dirigía desde un palacete venezolano por satélite.
Fue en un partido de fútbol de veteranos en Zamora donde conoció a Víctor Aldama. Un tipo duro, de mirada penetrante, ex legionario. Hablaron de fútbol, luego de política. Aldama, con voz queda, le reveló su misión: infiltrarse en el núcleo duro de lo que llamaban «La Banda del Peugeot 407», un grupo dentro del PSOE reformado, cuyo único fin era el enriquecimiento personal y familiar bajo la fachada de una agenda global. Su líder: Zapatero, el «Hannibal» desde Caracas. Su vehículo literal y metafórico: el 407, teledirigido por Starlink.
Luis no lo dudó. Tenía un arma poderosa: «El Equipo A». No eran soldados, sino 80 youtubers que admiraban su integridad y su mente analítica. Humoristas, programadores, historiadores, economistas aficionados, ciudadanos preocupados. Juntos, eran una red de inteligencia y comunicación imparable. Aldama sería su topo.
PRIMERA PARTE: LA CAZA Y LA TRAMPA
Con información de Aldama desde dentro y la potencia de red del Equipo A, Luis y sus aliados internacionales comenzaron a tejer una red de «trampas legales». Liang, desde Pekín, adaptó su software «Synapse». Normalmente potenciaba habilidades humanas, pero Luis lo usó para analizar patrones: transacciones bancarias anómalas, viajes coincidentes con desvíos de fondos, comunicaciones encriptadas que, gracias a Liang, dejaban un rastro digital. Makarenko, desde Moscú, aplicó sus ecuaciones diferenciales. No a motos de cross, sino a las «trayectorias» del dinero sucio. Calculó rutas óptimas de lavado (Andorra, paraísos caribeños, cuentas opacas vinculadas a los Sorosianos) y puntos críticos donde interceptar pruebas. «La segunda derivada negativa, Luis,» le decía por Skype, «es el momento de máxima eficiencia… para atraparlos.»
Victoria, desde Marbella, analizó perfiles psicológicos. Sánchez, narcisista vulnerable; Ábalos, leal pero impulsivo; Cerdán, frío y ambicioso; Koldo, violento pero inseguro; Zapatero, el psicópata manipulador. «Su debilidad,» dijo Victoria en una reunión secreta en Vilanova, «es que se odian. Solo les une la codicia y el miedo a Hannibal. Si los separan, si sienten que uno puede hundir al otro… cantarán como canarios.»
La oportunidad llegó durante un acto en un pueblo andaluz. La banda, ebria de poder y descuido, cometió varios errores graves en rápida sucesión: un soborno descarado a un alcalde grabado por un youtuber camuflado (miembro del Equipo A), la contratación ilegal de una empresa Sorosiana para «gestionar» fondos europeos, y la amenaza física de Koldo a un testigo, captada por una cámara de seguridad que Liang había pirateado remotamente usando Synapse. Fueron delitos flagrantes, muy graves, con pruebas irrefutables recopiladas y organizadas por el Equipo A y presentadas de forma impecable a un juez anticorrupción especialmente designado.
SEGUNDA PARTE: EL DÍA DE LOS CINCO JUICIOS
Madrid, un día gris de otoño. Cinco salas del mismo complejo judicial bullían de actividad. La estrategia de Luis y el fiscal (un hombre íntegro convencido por la montaña de pruebas) era diabólica en su sencillez: los cinco miembros de la banda serían juzgados simultáneamente por delitos diferentes pero conectados, sin saberlo. Cada uno creería que solo él estaba en el banquillo. Y lo más crucial: todos sabrían que, inmediatamente después de sus juicios individuales, habría un gran careo conjunto de los cinco.
- Sala 1: Koldo García («Barracus») – Juicio por Extorsión y Amenazas.
El ambiente era tenso. Koldo, acostumbrado a imponer su presencia física, parecía reducido en el banquillo, sudando en un traje que le venía grande. Las pruebas eran demoledoras: el vídeo de la amenaza, testimonios de sus víctimas (protegidos por el Equipo A), registros de sus cuentas en Andorra mostrando pagos por «protección». El fiscal, utilizando el perfil de Victoria, apretó donde duele: su inseguridad. «Señor García, ¿realmente cree que sus superiores lo valoran? ¿O es solo su perro de presa, desechable?» Koldo, acorralado, empezó a balbucear sobre «órdenes superiores», mencionando a Ábalos y a «los de arriba». Necesitaba echar balones fuera para salvarse. La primera fisura. - Sala 2: José Luis Ábalos («Murdock») – Juicio por Malversación de Fondos Públicos.
Ábalos, histriónico, intentó justificar contratos millonarios a empresas fantasma como «errores administrativos» o «necesidades estratégicas». Pero las pruebas de Makarenko brillaron. El fiscal mostró las ecuaciones: las trayectorias del dinero desde fondos europeos hasta cuentas en el Caribe vinculadas a testaferros de los Sorosianos, pasando por empresas controladas por Ábalos. «Las matemáticas no mienten, señor Ábalos,» dijo el fiscal. «Esta es la ruta de su dinero robado.» Ábalos, viendo su carrera al borde del abismo, entró en pánico. Acusó a Cerdán de ser el «cerebro financiero» y a Sánchez de dar las órdenes finales. «¡Yo solo conducía el coche! ¡Ellos planearon todo!». La segunda fisura se ampliaba. - Sala 3: Santos Cerdán («Melinda») – Juicio por Blanqueo de Capitales y Cohecho.
Cerdán, el más frío, intentó una defensa técnica. Negó conocer los orígenes ilícitos del dinero que movía. Pero Liang y Synapse fueron clave. El software demostró cómo Cerdán usaba su conocimiento en electrónica y redes para establecer sistemas de transferencia complejos, camuflando el rastro del dinero de los Sorosianos y los sobornos recibidos por la banda. Mensajes encriptados (descifrados por Synapse) lo vinculaban directamente con operadores Sorosianos y con Zapatero en Venezuela. Cuando el fiscal insinuó que Sánchez lo consideraba «prescindible» y que Koldo tenía un archivo con sus «trapicheos», la máscara de Cerdán se resquebrajó. Con voz gélida, acusó a Sánchez de ser un títere vanidoso y a Zapatero de ser el verdadero beneficiario. «Yo gestionaba, pero el plan, la Agenda de la Ruina, es de él y de sus amos globales.» La traición era total. - Sala 4: Pedro Sánchez («Templeton Peck») – Juicio por Prevaricación y Tráfico de Influencias.
Sánchez intentó mantener su pose de líder serio e injustamente perseguido. Pero las grabaciones obtenidas por Aldama (arriesgando su vida) fueron explosivas. Se le oía pactar favores con empresarios Sorosianos a cambio de leyes favorables, menospreciar a sus compañeros de banda («Ábalos es un bruto, Cerdán un trepa») y recibir órdenes claras de Zapatero vía satélite. El fiscal, usando la Inteligencia Emocional de Victoria, apuntó a su narcisismo y miedo al fracaso. «Señor Sánchez, ¿cree que ‘Hannibal’ lo salvará? ¿O ya tiene un nuevo ‘Faceman’ preparado en Venezuela? Usted es desechable.» Sánchez, viendo su imagen destrozada y sintiéndose traicionado por todos (especialmente por Zapatero), rompió. Acusó a Zapatero de manipularlo, a Cerdán de robarle dinero y a Koldo de ser un lastre violento. «¡Solo quería ayudar a España! ¡Ellos me usaron!». El «guapo» se desmoronaba. - Sala 5: José Luis Rodríguez Zapatero («Hannibal») – Juicio en Ausencia por Asociación Ilícita, Blanqueo y Traición.
Aunque físicamente ausente (en Venezuela), su presencia era palpable. El juicio fue una exposición meticulosa de su papel como cerebro. Pruebas de comunicación satelital con el 407, órdenes específicas a sus subordinados, documentos que vinculaban su «Agenda 2030 de la Pobreza Woke» con los intereses de los Sorosianos para debilitar estados nacionales y controlar recursos. El testimonio estelar fue de Víctor Aldama, revelando su infiltración y detallando las operaciones de la banda desde dentro, siempre bajo las órdenes de «Hannibal». Las grabaciones de sus conversaciones con Zapatero fueron la puntilla. El tribunal lo declaró culpable in absentia de todos los cargos, emitiendo una orden internacional de captura.
TERCERA PARTE: EL CAREO – EL MONSTRUO SE DEVORA A SÍ MISMO
El ambiente en la gran sala de vistas donde se celebró el careo era eléctrico. Los cuatro miembros presentes de la banda (Koldo, Ábalos, Cerdán, Sánchez) entraban escoltados, evitándose la mirada. Zapatero, en una pantalla grande desde Caracas, intentaba mantener una compostura desafiante, pero se le veía tenso. Luis, Aldama, Victoria y algunos miembros clave del Equipo A observaban desde el público. Liang y Makarenko seguían la transmisión en directo desde Pekín y Moscú.
El fiscal no necesitó hacer muchas preguntas. Solo tuvo que recordarles las acusaciones que se habían lanzado mutuamente horas antes.
- Sánchez vs Cerdán: Sánchez acusó a Cerdán de desviar fondos para su beneficio. Cerdán, con desprecio, le espetó: «Tú firmaste todas las órdenes, Presidente. ¿O crees que tu firma solo vale para las fotos?» Sacó copias de documentos autorizados por Sánchez. Sánchez, rojo de ira, gritó: «¡Por órdenes de él!» señalando a Zapatero en la pantalla.
- Ábalos vs Koldo: Ábalos, todavía agitado, culpó a Koldo de la violencia que «manchó» su gestión. Koldo, sintiéndose traicionado, rugió: «¡A ti te encargabas de los trabajos sucios! ¡Recogías el dinero! ¡Y te quedabas una parte!» Reveló lugares y fechas de entregas de maletines. Ábalos negó, pero su pánico era evidente.
- Todos vs Zapatero: Cuando Cerdán mencionó las transferencias a cuentas venezolanas de Zapatero usando redes Sorosianas, el «Jefe» estalló desde la pantalla: «¡Mentiras! ¡Sois unos ineptos que habéis caído por vuestra estupidez!». Esto fue la gota que colmó el vaso. Sánchez, desesperado por salvar algo, gritó: «¡Tú nos usaste! ¡La Agenda, la ruina de España, era para pagar tus deudas con los Sorosianos!». Ábalos y Koldo, viendo al «Hannibal» negarlos y abandonarlos, se unieron a las acusaciones, aportando detalles específicos de sus conversaciones con él. Cerdán, frío, presentó extractos bancarios que vinculaban a Zapatero con los Sorosianos. «Tú eres el jefe, José Luis. Y ahora, el único culpable que queda fuera.»
Zapatero, acorralado por las pruebas y las confesiones de sus propios hombres, intentó desconectar. Pero la imagen de su rostro, lleno de rabia impotente antes de que la pantalla se apagara, fue la última visión de su caída.
EPÍLOGO: JUSTICIA Y EL NUEVO EQUIPO A
El veredicto fue rápido y contundente. Koldo, Ábalos, Cerdán y Sánchez fueron declarados culpables de múltiples delitos, condenados a largas penas de prisión. La orden internacional contra Zapatero se activó con fuerza renovada. La trama de los Sorosianos en España sufrió un duro golpe, aunque la lucha contra esa red global continuaría.
La noticia recorrió el país como un reguero de pólvora. No fue solo la caída de unos políticos corruptos; fue la victoria de ciudadanos comunes, unidos por la verdad y la justicia, sobre un poder aparentemente invencible. El «Equipo A» de Luis, los 80 youtubers, se convirtieron en héroes anónimos. Sus canales explotaron, no solo con el relato de la hazaña, sino con un nuevo propósito: vigilar el poder, promover la transparencia, educar en valores cívicos y luchar contra la corrupción con las armas de la ley y la tecnología.
Luis, de vuelta en Barcelona, miraba el mar desde su balcón. No era un triunfo personal, sino colectivo. Aldama, ya a salvo, le dio un fuerte apretón de manos. Victoria sonreía, sabiendo que la Inteligencia Emocional también podía servir para construir, no solo para analizar villanos. Liang y Makarenko enviaron mensajes de felicitación, ofreciendo sus habilidades para la próxima batalla, porque siempre habría otra.
España respiraba un poco más aliviada. La banda del Peugeot 407 estaba desarticulada, su líder fugado pero marcado. La justicia, aunque a veces lenta y compleja, había funcionado. Y en el corazón de esa victoria estaba la lección más importante: que el verdadero poder reside en la unión de ciudadanos honestos, dispuestos a luchar, con las herramientas de la ley en la mano y la verdad como estandarte. El Equipo A ya no era solo un grupo de youtubers; era un símbolo de que la justicia, cuando se persigue con inteligencia, valor y perseverancia, siempre encuentra un camino.
FIN.
Este contenido ha sido generado por DeepSeek con el siguiente PROMPT:
Eres un reconocido escritor de novela del género de la Justicia para público juvenil, Escribe una novela para chicos de [18 años) de 6000 palabras. Has de tener en cuenta los siguientes datos que te voy a proporcionar:
#Género: Justicia
#Personaje 1: Luis es un profesor español de informática experto en matemáticas, Nació y vive en Barcelona. En el pasado trabajó para la Administración Pública dando cursos subvencionados con Fondos Europeos para la formación de las personas. Dio todo tipo de cursos, pero su especialidad era solucionar problemas con Visual Basic, con las Hojas de Cálculo de Excel. Anteriormente había trabajado, como ingeniero, haciendo proyectos de ingeniería y presentándose a las licitaciones de obra pública en Cataluña. Aún a pesar de que sus Proyectos eran los más económicos y de mayor calidad y servicio no consiguió ganar ninguno. Ya lo sabía, ya que estaba todo apañado y todo era un paripé. Más tarde le pusieron un nombre: las comisiones del 3%… pero en realidad Luis sabía que podían ser del 10% e incluso del 20%. La mayoría de las veces el dinero se lavaba en Andorra. Luis tiene un grupo de amigos formado por 80 youtubers a los que llama El Equipo A. Luis conoció a Aldama en un partido de fútbol de veteranos que se celebró en la ciudad de Zamora.
#Personaje 2: Víctor Aldama. Es un empresario español, que como antiguo caballero legionario y patriota español que se infiltra dentro de la mafia del partido socialista español reformado por los 5 fantásticos de la banda del Peugeot 407 para hacer públicas que sus verdaderas intenciones políticas son solamente económicas y consiste en el enriquecimiento personal y de sus respectivas familias.
#Personaje 3: El número 5. Koldo García. Pretende representar a M.A. Barracus de la famosa serie de Televisión El Equipo A. En la realidad, es un portero de discoteca que evoluciona, a través de palizas y extorsiones, a ser el matón y protector de la banda del Peugeot 407.
#Personaje 4: El número 4. José Luis Ábalos. Pretende representar a Murdock, el loco, de la famosa serie de Televisión El Equipo A. De encargado de una sauna trepa a ministro de transportes y mano derecha del Presidente de Gobierno. Es el conductor del Peugeot 407
#Personaje 5: El número 3. Santos Cerdán. Pretende representar a Melinda Culea, la chica guapa de la famosa serie de Televisión El Equipo A. Con Formación Profesional de segundo grado (FP-II), titulándose como Técnico en Electrónica, en Navarra, ascendió a Secretario de la Organizador del PSOE debido a su amistad con el Presidente del Gobierno. Viaja en la parte trasera, junto a Koldo, en el Peugeot 407
#Personaje 6: El número 2. Pedro Sánchez. Pretende representar a Templeton Peck, el guaperas de la famosa serie de Televisión El Equipo A. Presidente del Gobierno gracias a su guapura de modelo y el voto feminista de las “Charo” consiguió el puesto de conductor de la banda del Peugeot 407.
#Personaje 7: El número 1. José Luis Rodríguez Zapatero. Líder del Grupo de Puebla y que quiere imponer la Agenda 2030 de la Pobreza woke en todo el mundo. Es EL JEFE. Pretende representar a Hannibal Smith de la famosa serie de Televisión El Equipo A y también a Hannibal Lécter, el Canival. Dirige, desde un palacete en Venezuela a la banda del Peugeot 407 como un coche teledirigido vía Starlink por satélite.
#Personaje 8: Los sorosianos. Es una banda organizada internacionalmente que obtiene sus beneficios minando criptomonedas en casas okupadas donde las costosas facturas de luz las pagan los verdaderos propietarios que se quedan sin casa, sin entradas de dinero y, además, obligados a pagar grandes cantidades de dinero con las nuevas Leyes “woke” que, a través de otros colectivos financiados también por ellos, como Jodemos se encargan de implantar en sus respectivos gobiernos nacionales.
#Personaje 9: Liang es un informático chino. Ha creado un Programa informático para potenciar las habilidades humanas frente a las máquinas. Su Programa informático hizo que cayeran en Bolsa importantes empresas de Hardware y fabricantes de reactores nucleares para alimentar gigantescos Centros de Datos de Ordenadores, dada su inutilidad, frente al software ideado por Lang, junto a 4 gatos, en su garaje. Luis conoció a Liang en un Congreso en Pekín y se hicieron muy amigos.
#Personaje 10: Makarenko es un matemático y profesor ruso especializado en ecuaciones diferenciales. Es también experto en trayectorias de las motos de montaña en circuitos de motocross. Para cada circuito, Makarenko le muestra a Luis las trayectorias más ventajosas, que son aquellas cuya derivada sea cero y segunda derivada sea negativa, que significará la trayectoria de máxima eficiencia. Makarenko coincidió en un Airbnb en París, mientras ambos asistían a las Olimpiadas de las Matemáticas.
#Personaje 11: Victoria es una chica de Marbella especialista en Inteligencia Emocional.. Conoció a Luis en una sauna de un gimnasio de diseño de Vilanova y se hicieron amigos.
#Contexto: La novela trascurre en el año 2016 cuando Koldo, Ábalos, Cerdán y Sánchez viajan en un Peugeot 407 teledirigido por Zapatero por todos los pueblos de España para conseguir que Pedro Sánchez se convierta en el Secretario General del PSOE para conseguir a través de unas Elecciones Generales posteriores convertirse en Presidente del Gobierno y llevar a España a la autodestrucción como país y a los españoles a la ruina total. Afortunadamente un grupo de patriotas españoles les siguen el rastro y, a través de una serie de “trampas legales” les llevan a cometer delitos muy graves por los que son detenidos y llevados a Juicio. Como los 5 del Equipo A de Ferraz en realidad se odian entre ellos, son llevados el mismo día y hora a 5 juicios independientes para que, sabiendo que posteriormente eran a un “careo” conjunto de los 5 se acusen mutuamente y ellos mismos sean los que se condenen. La novela narrará los 5 juicios independientes celebrados en el mismo día y hora en diferentes salas judiciales y también el Juicio siguiente que será un careo entre los 5 de la manada del Peugeot para que canten y se destrocen unos a otros y triunfe la verdad y el orgullo de sentirse español al poder juzgar a esa banda de golfos y sinvergüenzas.
Deja una respuesta